(Éxodo 20:16): “No darás falso testimonio contra tu prójimo”
(Éxodo 23:1): "No admitirás falso rumor. No te concertarás con el impío para ser testigo falso"
(Éxodo 23:7): "Aléjate de acusación falsa, y no mates al inocente ni al justo, porque yo no absolveré al culpable"
(Levítico 19:11): “No hurtaréis, ni engañaréis, ni os mentiréis unos a otros”
(Levítico 19:16): "No andarás chismeando en tu pueblo. No te pondrás contra la sangre de tu prójimo. Yo soy el SEÑOR"
(Proverbios 6:16-19): "Hay seis cosas que el Señor aborrece, siete que son una abominación para él: los ojos altivos, la lengua mentirosa, manos que derraman sangre inocente, el corazón que maquina pensamientos inicuos, los pies presurosos á correr al mal, el testigo falso que respira mentiras, y el que siembra discordia entre hermanos"
(Proverbios 11:13): "El que anda en chismes, descubre el secreto, mas el de espíritu fiel cubre el asunto"
(Proverbios 12:17): "El que habla verdad declara lo que es justo, pero el testigo falso, falsedad"
(Proverbios 14:5): "El testigo veraz no mentirá, pero el testigo falso habla mentiras"
(Proverbios 16:28): “Un hombre deshonesto extiende contiendas, y el chismoso divide a los amigos”
(Proverbios 19:5): "El testigo falso no quedará sin castigo; Y el que habla mentiras no escapará"
(Proverbios 19:9): "El testigo falso no quedará sin castigo, y el que cuenta mentiras perecerá"
(Proverbios 19:11): "La discreción del hombre le hace lento para la ira, y su gloria es pasar por alto una ofensa"
(Proverbios 20:19): "El que anda murmurando revela secretos, por tanto no te asocies con el chismoso"
(Proverbios 21:28): "El testigo falso perecerá, mas el hombre que escucha, hablará siempre"
(Proverbios 25:9): "Discute tu caso con tu prójimo y no descubras el secreto de otro"
(Proverbios 26:20): "Sin leña se apaga el fuego: Y donde no hay chismoso, cesa la contienda"
(Salmos 15:3): "El que no calumnia con su lengua, no hace mal a su prójimo, ni toma reproche contra su amigo"
(Salmos 24:4): "El de manos limpias y corazón puro; el que no ha alzado su alma a la falsedad, ni jurado con engaño"
(Salmo 34:13): "Guarda tu lengua del mal y tus labios de hablar engaño"
(Salmos 101:5): "Destruiré al que en secreto calumnia a su prójimo; no toleraré al de ojos altaneros y de corazón arrogante. /Al detractor de su prójimo a escondidas, a éste cortaré; al altivo de ojos, y de corazón vanidoso, a éste no puedo sufrir"
(Jeremías 6:28): "Los que andan calumniando son rebeldes y obstinados"
(Mateo 12:34): "¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca"
(Mateo 12:36): “Y yo os digo que de toda palabra vana que hablen los hombres, darán cuenta de ella en el día del juicio”
(Mateo 12:37): "Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado"
(Mateo 15:11): "No es lo que entra en la boca lo que contamina al hombre; sino lo que sale de la boca, eso es lo que contamina al hombre"
(Mateo 18:15): "Y si tu hermano peca, ve y repréndelo a solas; si te escucha, has ganado a tu hermano"
(Lucas 6:31): "Y como queréis que os hagan los hombres, así hacedles también vosotros"
(Romanos 2:1): "Por lo cual no tienes excusa, oh hombre, quienquiera que seas tú que juzgas; pues en lo que juzgas a otro, te condenas a ti mismo, porque lo mismo haces"
(1 Corintios 15:33): “No os engañéis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres”
(Efesios 4:25): "dejando a un lado la falsedad, hablad verdad cada cual con su prójimo"
(Efesios 4:29): “Ninguna palabra corrupta salga de vuestra boca”
(Santiago 1:26): "Si alguno se cree religioso y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana"
(Santiago 3:6): "Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. Así es la lengua entre nuestros miembros que contamina todo el cuerpo, e inflama el curso de nuestro naturaleza, y es inflamada del infierno"
(Santiago 4:11): "Hermanos, no murmuréis los unos de los otros [Hermanos, no habléis mal los unos de los otros]. El que murmura del hermano, y juzga á su hermano, este tal murmura de la ley, y juzga á la ley; pero si tú juzgas á la ley, no eres guardador de la ley, sino juez"
(Tito 3:2): "Que a nadie infamen (no hablen mal de nadie), no sean pendencieros, sino modestos, mostrando toda mansedumbre para con todos los hombres"
COMENTARIOS FINALES:
MENTIR puede implicar el hablar, charlar o conversar de la siguiente forma:
I. Engañar, inventar historias sobre la gente y contarlas como si fueran ciertas, torcer las palabras, inducir al error, llevar a conclusiones equivocadas, omitir los hechos, o tergiversar lo que se dijo.
II. Exagerar datos, prevaricar, citar estadísticas de forma injusta.
III. Afirmar lo que se ignora y lo que no se sabe.
IV. Generalizar, estereotipar. Decir “siempre” cuando NO es siempre o decir “nunca” cuando NO siempre es nunca.
V. Fingir el carácter para usarlo como táctica engañosa y desleal.
VI. Difundir chismes o rumores sin fundamento.
VII. Afirmar cosas otros no hicieron (por juzgar por las apariencias) . Afirmar que son ciertas cosas que nunca pasaron.
VIII. Convencerte a ti mismo que algo – falso - es “verdadero” para poder decirlo o hacerlo.
IX. Ser hipócrita, o de doble ánimo. No cumplir lo que prometes. No hacer lo que dices que haces
X. Aseverar o declarar cosas citando datos fuera de contexto.
XI. Crearle a alguien una buena o mala imágen diciendo cosas de su vida que no son ciertas.
XII. Participar en la creación o la repetición de rumores acerca de algo o alguien.
Suponer indagar o especular no significa mentir, pero si alguien repite las suposiciones afirmándolas como si fueran ciertas (siendo falsas), se está esparciendo una mentira o difundiendo una falsedad
CHISMEAR es hablar ociosamente (sin un propósito bueno) acerca de rumores o asuntos personales o privados de los demás. Participar en charlas ociosas de naturaleza trivial. Repetir especulaciones de la gente que no tienen sustento verdadero. Algunas de las razones por las cuales la gente chismea pueden ser: para sentirse superior, por aburrimiento, por envidia, para sentirse parte del grupo, para llamar la atención o “sacar” su ira, rencor, enojo u odio. Otro refrán nos dice que “Una persona que miente: o chismea por necedad, o engaña por malicia”.
Si alguien introduce un chisme nuestra reacción tendría que no alimentar al chismoso con preguntas de curiosidad, no concordar y no preguntar más cosas. Algunas ideas para evadir el chisme al tener una conversación con alguien pueden ser decirle a la persona que está hablando de eso: "Me doy cuenta de que hablas mucho de esto. ¿Por qué le interesa tanto? "; ¿a qué viene esto?, ¿cuál es el punto?. Me siento incómodo de saber asuntos los privados de las personas” “No es bueno saber cosas demás, a no ser que haya una manera de ayudar".
Lo que no es mentir ni chismear es decir las cosas tal y como constan, tal como pasaron, de una forma respetuosa. Decir sólo lo que se sabe, con discreción y a su debido tiempo, momento, y lugar; decir sólo lo que es necesario para ayudar. Un refrán dice que "quien dice la verdad, ni peca ni miente”. Pero la verdad no debe ser irrespetuosa, ni imprudente, ni metiche. La «Verdad» no es lo que diga yo, ni lo que digan los demás, ni lo que diga la mayoría; la «Verdad» es todo lo que Dios dice, en línea al mismo tiempo con el amor y la justicia.
